Lluvia de rocas

La mejor forma que se me ocurre para comenzar este post es la de preguntarle al lector(a) cual es su clima favorito. Sin falta muchos dirán que un día con el cielo despejado, una buena brisa y una temperatura fresca. a KF [osease yo con un seudónimo] le gustan mas los días grises y fríos, para nada le disgusta caminar bajo la lluvia. Pero vamos que esos lujos solo nos los podemos dar en este planeta, en venus la lluvia no sería de agua sino de ácido y en COROT-7b al parecer el cielo nos arrojaría piedras cual universitario en plena protesta.

COROT-7 es una estrella enana naranja ubicada en la constelación de monoceros, el telescopio espacial COROT descubrió a nuestro querido exoplaneta COROT7-b en órbita a esta estrella. Por sus características se puede deducir con casi total certeza que esta compuesto por rocas de silicatos al igual que la tierra. Cuando se dice igual que la tierra se habla solo en composición, no es para imaginarse una bonita pradera verde ni por asomo, COROT7-b esta unas 23 veces a menos distancia de su estrella que mercurio de nuestro sol, lo cual hace que una cara sea ardiente y la otra helada.

Pero ahora viene lo bueno, por ardiente me refiero a una temperatura de 2.300 grados [centigrados por supuesto], esta temperatura puede llegar a vaporizar las rocas, y tal parece que este vapor rocoso forma nubes. Las simulaciones muestran que es bastante posible que cuando dos frentes se encuentran el vapor se condensa y precipita, y así tenemos una lluvia no de agua sino de rocas.

Fuente: Washington University In St. Louis